La reflexología podal en Bogotá es un método terapéutico que implica aplicar presiones y fricciones en puntos específicos localizados en ambos pies. Estos puntos reflejan diferentes áreas del cuerpo como órganos, articulaciones, extremidades y glándulas a través de la comunicación del sistema nervioso. Este tratamiento busca mejorar tanto la salud física como mental del paciente.
¿Qué beneficios aporta la reflexología podal y cómo puede ayudarle?
La reflexología podal se ha distinguido por su capacidad para:
- Mejorar el funcionamiento de los órganos detoxificadores como los pulmones, riñones, intestinos, sistema linfático y piel.
- Complementar tratamientos para el control del dolor, tanto el reciente como el crónico, incluyendo el postquirúrgico.
- Equilibrar las funciones neurológicas, hormonales y del sistema inmune, asociadas al estrés crónico.
- Proporcionar sensación de bienestar en casos de enfermedades crónicas.
- Promover estados de relajación física y mental, así como una sensación de tranquilidad al concluir la terapia.
¿Cómo se desarrolla una terapia de reflexología podal en Bogotá?
Después de una breve evaluación del estado de salud, el paciente se recuesta en una camilla, permaneciendo vestido, descalzo y sin medias. Si lo desea, se le cubrirá con una manta para mayor comodidad.
Se realiza un masaje suave con aceite, comenzando por el pie derecho. Luego, se aplican presiones y fricciones en puntos específicos de este pie, los cuales pueden generar sensaciones diversas, algunas personas pueden percibir dolor mientras que para otras resulta relajante. Se estimulan puntos relacionados con órganos, funciones hormonales y neurológicas, así como aquellos vinculados al motivo de la consulta. Posteriormente, se concluye con un breve masaje. Este proceso se repite en el otro pie.
Durante la sesión, se puede optar por escuchar sonidos relajantes pregrabados o en vivo por períodos cortos. O si lo prefiere, se explicarán los puntos estimulados a lo largo de la terapia.
Cantidad de sesiones y beneficios continuos
El número de sesiones varía según el progreso individual. Después de la terapia, es posible percibir cambios en los síntomas físicos o mentales que motivaron la primera consulta. Además, cada sesión ayuda a evaluar la ubicación de desequilibrios corporales o mentales. Con el transcurso de las sesiones, la intensidad de estos desequilibrios tiende a disminuir. El objetivo es alcanzar un estado de equilibrio total, lo que permite determinar si se requieren más sesiones o si ya no son necesarias.
En términos generales se recomienda:
- Una sesión cada 3-5 días para síntomas.
- Una sesión cada 7 a 15 días para pacientes con síntomas crónicos, enfermedades prolongadas o personas sanas con desequilibrios identificados durante la terapia.
¿Por qué elegir esta terapia de reflexología podal en Bogotá?
✅ Benefíciese de la experiencia de una terapeuta médica preparada en el Instituto Superior de Medicinas Tradicionales (ISMET, Barcelona) con más de 5 años de experiencia trabajando la terapia.
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